Qué sé yo de almas azules, de mentes privilegiadas o de ciudades encantadas. Por cada paso que doy gano doscientos. Llegamos a lo más alto, haciendo nudos en el viento y dejamos todo por un simple desencuentro. Matiz. Todo de depende de. ¿Qué? De ti, de mí. Volvamos a sentir. Gritemos por vivir.
GRITAR.
ResponderEliminaradoro GRITAR
:)
Ay mama, como amo tu blog. Demasiado tiempo sin pasarme tía.
ResponderEliminarTitulo de vetusta no?