miércoles, 21 de abril de 2010
Mirador con vistas al infinito.
Despertó tranquila, relajada, como cualquier otro sábado de Mayo. Como cualquier otro sábado se apoyó en la ventana y observó pasar el tiempo, el viento y con ello, los barcos partiendo hacia el mar. Pensando en todo lo que había ido y en lo que quedaba aún por llegar. Intentó descifrar dragones convertidos en nubes o nubes convertidas en dragones. Escuchó al viento cantar, bailar, a su propio compás. En ese maldito, o bendito lugar; quién sabe, había visto su vida pasar y pasar sin más, había visto inviernos, primaveras y otoños, marineros, soldados, solteros, casados, ofertas, mentiras, Octubres, sonrisas, pecados. Era como si el cielo hubiera presenciado un impacto total, como si hubiera pintado un retrato en pasado, presente y futuro de su propio recorrido. Se sintió de repente irremediablemente atada a ese lugar, a esa gente y a los domingos por la tarde observando las puestas del sol. Quiso gritar a los cuatro vientos que ninguno de ellos dejara que nada cambiara pero, advirtió, que mientras ella soñaba, la vida pasaba y la gente cambiaba. Se preguntó por qué razón había llegado hasta allí, cuál de todas sus decisiones había decidido romper con todo y volar. Y si la pregunta era por qué, no había más que hablar de más o menos corrección; dejarse llevar suena demasiado bien. Viviendo así, soñando así, empezando, acabando así, el sol cambiaba de turno y la luna abría su paso a través del cielo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
a mí me encantaría poder disfrutar de todos los atardeceres :) me gusta el de coruña en verano, porque el sol cae sobre el mar, en la playa de riazor y el orzán, y bueno, es como si se diese un chapuzón!! y me encanta! un biquiño y disfruta del día! aquí está tan tan bonito!! :) biquiñosss
ResponderEliminarotro texto que acaba genial :)
ResponderEliminarIrremediablemente nada permanece, especialmente los momentos especiales, esos se diluyen con una pasmosa facilidad en nuestras manos, todo cambia y al estilo de Murphy diría que a peor.
ResponderEliminarGenial como siempre.
Mientras no se pare el mundo...
ResponderEliminar:)
cartas entrelazadas.
Qué grande eres
Bueno, la que decides llegar eres tú, ¿no? si no te gusta, siempre puedes cambiar :D
ResponderEliminarUn beso, texto genial ^^