sábado, 3 de octubre de 2009

Ahora ya estás advertido, no te fíes de un animal herido.

Esperame dentro, que fuera me resfrío de tanta realidad. El otoño me enternece, me gusta. Los cientos de hojas secas por el suelo esperando a que las hagan crujir. Tanta lluvia. Frío. Desencorcho paredes de hielo. Me disfrazo de mí. Me diluyo. Puerta tras puerta, mundo tras mundo. Dos cafés para dos historias distintas.

Y abrir tu puerta de cuarenta y tres candados.

2 comentarios:

  1. pues espero que tras ella, todo sea mas hermoso.
    suerte^^

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  2. Candados de amor. Sin necesidad de romperlos.

    Violeta, te tenias que haber venido el sábado (:

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