domingo, 5 de diciembre de 2010

Sálvame con la mirada cargada de esperanza, con las manos ceñidas a mi cuerpo y el alma entera, eterna, real.

sábado, 4 de diciembre de 2010

it's a cold and it's a broken hallelujah.

No siempre ha sido así mi vida, así de rompecabezas. Quiero decir... esto no es nada. Todo a mi alrededor está deseando arder y yo estoy deseando huir. No creo que estas sean todas mis razones, no creo que hayan terminado crujir los corazones que he guardado en este antro. Respiro lento pero fuerte las estaciones que he dejado por los suelos...









domingo, 21 de noviembre de 2010

Perder las ganas de no hacer nada para hacerlo todo y de una vez. Correr el riesgo y escapar de él. Saber por qué pero no para qué... y qué.

martes, 9 de noviembre de 2010

Como si ya lo supiéramos todo. Como si cada mirada llevara detrás las razones de este silencio. Como cuando miras una foto, o escuchas una vieja canción o te ves actuando como hace tiempo. Como si al verte me quitaran un poquito de aire. Como si fueras un recuerdo, ¿sabes? es como si no existieras en mi vida. Como si te me escurrieras entre las manos. Como aquí al lado pero a miles de kilómetros de frío. Como si al querer hablarte se me quebrara la voz y no pudiera apenas responderte, como si algo me atara a este suelo, a este sitio y a esta imagen. Como si hubiera perdido la partida, como si pertenecieras a la vida del resto, de los otros... como si no fuera a tenerte cerca nunca más. Porque ya no te queda nada que decir. Romper el hielo antes de que se transforme en paredes a nuestro alrededor.

miércoles, 20 de octubre de 2010

Peor que el olvido.

Siempre pudiste haberlo hecho mejor. No es tan fácil permitirse una sonrisa de más un lunes cualquiera, o ignorar un gesto incapaz, la voz, ni siquiera...

jueves, 23 de septiembre de 2010

No te (re)conozco. Parece que alguien ha barrido nuestro tiempo.







memorirédeganasdedecirtequetevoyaechardemenos.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Se te hunde dentro dentro, perder la partida y sin tener ningún jugador de frente, mirándote a los ojos y escupiendote la verdad.
¿Es que no vas a hacer nada? No, no vas a hacer nada...
Tú que tanto te quejabas del orgullo y ahora estás de él hasta el cuello. Es curioso, ¿no? yo aún estoy aquí plantada. Tu indiferencia es aplastante.
No, no estoy bien...

lunes, 13 de septiembre de 2010

Hay veces que lo bordas y veces que lo tiras por la borda.

Y ahora es cuando lo estás tirando por la borda.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Y, ¡plof!...desapareces.
Des.
Apareces.

martes, 17 de agosto de 2010

Vidas que dejé cruzadas.

Me ha quedado por decirte que por mucho que me quieras nunca he sido suficiente. Que tu risa no ha dejado de crujir conmigo nunca. Me ha quedado por decirte que tus ojos me han devuelto más de una vez la vida. Que lo sé, que lo sé todo pero soy tan cobarde... Que huyo a escondidas de mí, de ti y de todos los que pisan nuestro suelo. Que no dejo de pensar en cómo puedo hacerles tanto daño. Me ha quedado por decirte que no soporto no ser yo. Que no aguanto que puedas seguir sin mí. Que nadie me había querido así antes. Me ha quedado por decirte que lo siento, por haberte elegido a ti como venganza. Que quería ver lo que se sentía. Que tú has sido ese único, el resumen de todo y de nada. Me ha quedado por decirte que lamento no haber recogido todo lo que cayó sobre mis pies. Y todo lo que calló. Que te agradezco haberme soltado a la cara la verdad hasta rabiar. Me he quedado sin hablarte de todo, de todos y cada uno de mis pensamientos. Sin avisarte de que sigo aún aquí, y desde siempre. Me he quedado sin besarte y ya no sé ni cuantas veces, porque sí. Me he quedado sin contarte que no tengo solución, que desde que apareciste el mundo parece haber girado en otro sentido y de otra forma, para nada. Que no hace falta buscarle explicación. Me he quedado sin quererte suficiente. Mente poco.
Y demasiado para mí.

martes, 3 de agosto de 2010

Todo tu miedo en un puñado de polvo.

Esperas a que todos los recuerdos pasen como una ráfaga por tu cabeza y entonces comprendes. Y empiezas a repasar uno a uno todos los momentos. Te sientes estúpida y a la vez tan libre... Estúpida por creer que eras tú el problema y libre, libre por saber que no lo eras. Reconoces que sí, que estás encantada de escuchar esas palabras, pero que no, que nunca lo has sabido del todo. Piensas joder, ya está, se ha acabado... pero en fin, qué mas da, tampoco servía de nada. Pero eso no te tranquiliza, siempre has sido mucho, mucho más egoísta de lo que creías. Cierras tus ojitos y ríes, con esa risa nerviosa que aparece como para intentar salvarte del resto. En el fondo no sabes muy bien como sentirte. Y no, por una vez en tu vida no te echas a llorar y te lamentas. Recuerdas que te prometiste no hacerlo ya más. Nunca más.
Podrías hacer algo...

viernes, 23 de julio de 2010

Un día de repente rompes. Rompes a...reír. O a llorar. O simplemente rompes, y ya está. En mil o en cien pedazos repartidos por toda la habitación. O rompes por dentro, sin apenas darte cuenta salvo que reconoces un tono más amargo a medida que pasan las semanas. Lo peor de todo es eso, cuando te rompes y no lo sabes o no puedes impedirlo, o cierras los ojos. Entonces solamente estás, ni siquiera vives porque eso implicaría avanzar, aunque sólo sea un poco. Pero cuando te has roto... te han roto, entonces, estás estancado. Romper a. Romper con. Romper se.

jueves, 15 de julio de 2010

Te ví en un escenario intentando disparar.

Sonreía sin quererlo y me miraba con aquellos ojos café. Giraba la cabeza intentando ocultar el sonrojo de sus mejillas. Y reía constantemente, derrochando en cada carcajada toneladas y toneladas de vida, haciéndome reír a su compás. Olía a vainilla y torcía los labios cuando no estaba de acuerdo. Era dulce, dulce. Y frágil, extremadamente frágil a pesar de que intentara ocultarlo siempre. A veces caía, de repente lo dejaba todo y yo me perdía con-sin ella.

jueves, 1 de julio de 2010

Desmoralizado y empañado de rabia. Aprietas los puños, cierras los ojos y gritas. Te pudres, lo sé. Se siente, tu vida está a la vuelta de la esquina. Quizá un poco más allá, pero corre; creo recordar que hace unos años se encontraba aquí (des)pegada, pero aún la podías agarrar. Te culpo...¡claro! ¿y a quién sino?
A veces creo que soy como una de esas lamentables vidas de alcantarilla.

domingo, 27 de junio de 2010

Anoche soñé contigo.

Flotábamos sobre nuestros cielos teñidos de malva. Exprimíamos el tiempo hasta reducirlo a aquellos besos eternos. Recorría tu piel de terciopelo, tu mirada infinita, tus curvas de infarto, tus sonrisas, tus risas. Creábamos sueños. A veces, incluso, hacíamos escapadas a la Luna. Esperábamos abrazados la llegada del alba. Descubrimos rincones prohibidos, paisajes desconocidos. Abandonábamos los sentidos cada vez que nuestros cuerpos se juntaban hasta parecer uno solo. Era todo tan efímero y a la vez tan inmenso, interminable, inagotable. Uníamos nuestras manos como quien ata dos almas, pensando ''para siempre''. Soñabas y soñabas, pero para mí, preciosa, el sueño eras tú. Mirabas intrigada con tus ojos color miel y sonreías. Decías que siempre se te había escapado el tiempo entre las manos y que por mucho que corrieras nunca habías conseguido alcanzarlo. Debí suponer que algún día marcharías con el tiempo pero no lo vi, cómo iba a ver algo con tanto amor por encima. Invadiste mi casa, mi vida, mi espacio, fuiste un intermedio, un viaje a otro tiempo y a otro lugar. Me enviaste a mil millas de mi razón y te encargaste de suprimir mi corazón. Anoche soñé contigo, princesa...




martes, 22 de junio de 2010

¿Nos sobran los motivos?

lunes, 14 de junio de 2010

Unos labios sin beso, una pareja sin sexo.

Rompo con todo en un segundo y sin querer lo reconstruyo en el siguiente. Todo se mueve a mi alrededor, con intervenciones no deseadas y malas jugadas, paradas de más. Pero al fin y al cabo fluye, gira, pasa, sube, baja, corre. A veces mi hipersensibilidad solo necesita un empujón, oír lo que estaba deseando escuchar para calmarse. Pero nunca encuentro la palabra exacta, ni yo ni nadie, ni yo para nadie, ni nadie para mí. Por eso pienso que jamás ha sido ni será suficiente conmigo, porque mis motivos son cortos, rápidos, efímeros, simplemente están, y se van. Porque me falta la otra parte, ¿de qué? No sé. De mí, quizá. No hablo de amor, aunque tampoco dejo de hablar de amor. Algo, alguien... Debería desprenderme de mí de una vez. Deber, tener...

domingo, 13 de junio de 2010

Inútil. Como los besos de alquiler.

Sucios y llenos de tinta, calados hasta los huesos de la más pura soledad, a tientas. Con el cielo a ciegas, el destino incierto y los labios sedientos de nada más. Y los ojos abiertos a regañadientes, deseando evitar. Nos.
Abrázame.

martes, 8 de junio de 2010

domingo, 6 de junio de 2010

Por qué, mi amor,

Por qué.
Traté de describir el tedio y la constancia, algunas cosas verdaderas, creí que duraderas. Conté hacia atrás para dormirte, y fracasé...
Tú me dedicaste el espacio, la cordura la lluvia caliente y húmeda, la historia de tu espera que viene a por mi las tardes de marzo.
Mira el pecho abierto, tu corazón inmóvil está a punto de partirse en millones de colores. Y vas a morir en este momento.

sábado, 5 de junio de 2010

Blocking my mind, blocking my mind.

Ya que mi vida salpica lo que no tiene y escupe lo que desea, ya que mis labios pronuncian lo que no quieren y esperan lo que no llega, ya que mi alma se tiñe de azul cada noche y espera, desesperada; dormiré acurrucada, a los pies de cada estación de sueños(a punto de romper). ¿Fui yo o fueron los eneros, los febreros, congelados? ¿Fuiste tú o fueron mis rodeos, mis deseos amoratados? Si no sé ni lo que digo, si no sé ni lo que hago...

domingo, 30 de mayo de 2010

Nunca ha sido suficiente conmigo.

miércoles, 26 de mayo de 2010

Las ganas de inventar y un ¡atiza! al cielo.

Qué sé yo de almas azules, de mentes privilegiadas o de ciudades encantadas. Por cada paso que doy gano doscientos. Llegamos a lo más alto, haciendo nudos en el viento y dejamos todo por un simple desencuentro. Matiz. Todo de depende de. ¿Qué? De ti, de mí. Volvamos a sentir. Gritemos por vivir.

jueves, 20 de mayo de 2010

Abrigo largo pa' taparte los fracasos.

Y despejas el pasado de repente y sin aviso y me encarcelas en un rincón sin salida. No sé siquiera por qué me haces temblar aún y es ridículo pensar que al gritar sólo se escucha la nada. El sol cada vez está mas cerca de mi piel y los momentos se evaporan cada vez que...cada vez que ¿qué? Somos paralelos, magnéticos, en cuanto despertamos nuestras miradas evocadas de una vez.

domingo, 9 de mayo de 2010

No es dramático, esto no es tan trágico.

Supongo que... supongo que esto en una fase más de las miles de ráfagas que me han intentado pasar por encima. Y que esto es una vez de las muchas que me intento rendir ante los pies de nadie. Pero, maldita cordura, locura que pretende escapar, como los segundos resbalando, como los momentos que han ido convirtiéndose en cenizas poco a poco. No sé qué significo, qué significas, no sé escribirte ni escribirme.

martes, 4 de mayo de 2010

Y cuando te hablo así no sabes qué pretendo.

Parpadeo ante estos latidos paralelos a mí. Resucito todos los papeles enterrados bajo mis sábanas. Corrijo al viento e insisto en que cambie de dirección. Desisto en descansar, por hoy, de la cruda realidad. Tiemblo al escuchar cómo crujen los recuerdos. Tú me abrazas. Yo sonrío y rompo a golpes la ansiedad. Creerás en sueños ideados para ti y yo gritaré que no, que no es posible. Veo como caen las palabras, y una mano sobre otra y siento vértigo.
A veces creo que nunca he aprendido.

miércoles, 21 de abril de 2010

Mirador con vistas al infinito.

Despertó tranquila, relajada, como cualquier otro sábado de Mayo. Como cualquier otro sábado se apoyó en la ventana y observó pasar el tiempo, el viento y con ello, los barcos partiendo hacia el mar. Pensando en todo lo que había ido y en lo que quedaba aún por llegar. Intentó descifrar dragones convertidos en nubes o nubes convertidas en dragones. Escuchó al viento cantar, bailar, a su propio compás. En ese maldito, o bendito lugar; quién sabe, había visto su vida pasar y pasar sin más, había visto inviernos, primaveras y otoños, marineros, soldados, solteros, casados, ofertas, mentiras, Octubres, sonrisas, pecados. Era como si el cielo hubiera presenciado un impacto total, como si hubiera pintado un retrato en pasado, presente y futuro de su propio recorrido. Se sintió de repente irremediablemente atada a ese lugar, a esa gente y a los domingos por la tarde observando las puestas del sol. Quiso gritar a los cuatro vientos que ninguno de ellos dejara que nada cambiara pero, advirtió, que mientras ella soñaba, la vida pasaba y la gente cambiaba. Se preguntó por qué razón había llegado hasta allí, cuál de todas sus decisiones había decidido romper con todo y volar. Y si la pregunta era por qué, no había más que hablar de más o menos corrección; dejarse llevar suena demasiado bien. Viviendo así, soñando así, empezando, acabando así, el sol cambiaba de turno y la luna abría su paso a través del cielo.

domingo, 18 de abril de 2010

Un día en el mundo.

A veces me reconcilio con el mundo, a ratos; porque este no es el mío, lo sé, lo siento a la legua. Sin embargo me encuentro a gusto; esto me hace pensar en la gran capacidad de adaptación del ser humano, aunque quizás sea que sé que este no es mi mundo pero tampoco sé cual lo es. ¿Me conformo? Me conformo pero no me sirve hacerlo porque, si vivo así, qué gracia tiene. ¿Voy a estar siempre a la espera de algo? ¿Quiere decir eso? Tampoco quiero esperar siempre; no sé exactamente qué estoy esperando. Supongo que una pieza que haga que todo encaje. Pero, ¿de qué forma? Si lo que estoy esperando es amor, puede que lo haga durante toda mi vida... Creo que lo esperamos porque es la única forma de sentirte aceptado por completo. Porque, en él, encuentras una base de apoyo y una unión, una aceptación física y psicológica. Y, por otro lado, tú mismo aportas esto a otro, lo que hace que, en una sola persona, encuentres lo que el resto del mundo no puede darte. Pero, ¿se puede vivir sólo de amor? Me refiero a que, la amistad, puede ser prescindible, si recalco lo de antes. Todo viene y va, y cuando va, necesitamos un seguro, algo a lo que aferrarnos. Así que... supongo que nos utilizamos continuamente, aparentemente, o sin apariencias.
¿Es mi vida un sueño continuo? No soy presente, soy pasado y futuro. No estoy ausente, estoy dentro de mi mente.

viernes, 16 de abril de 2010

Sólo yo sé el motivo, y no es bonito.

Supongo que escribo para encontrarme, o igual para saciarme, para deshacerme. Y no sé siquiera si consigo aparecer entre tantas y tantas letras. Siento como si mi vida dependiera de un segundo de incertidumbre, como si pendiera de un hilo y fuera flexible a mi alrededor. Repudio... esta forma y estas causas, este día y esta noche, estos gestos, mis adentros. Somos cínicos a más no poder y eso me destruye, somos marionetas, sucias, rotas, y nadie nos puede ver.

martes, 13 de abril de 2010

Ayer, viendo un corto que hablaba de sueños me dí cuenta otra vez de que la actitud lo es todo, de que todo, es la actitud. Y sonreí, pensando que había llegado al punto de escape, al final de mis precipicios y que, tarde o temprano, el ciclo continuaría. Esto me hace pensar en el destino y demás dichos inciertos, pero, en fin, es un martes y no hay nada que objetar.

martes, 6 de abril de 2010

Sé, que has dejado de perseguir corazonadas de golpe, que piensas que todo esto da asco y que no dicen nada estas palabras, huecas; dices, que únicamente las ves caer y postrarse a tus pies. Dices que 400 golpes contra la pared han sido bastantes para aprender, y yo, mi amor, detesto oír como pronuncias gritos sórdidos. Me miras mientras se te escurren lágrimas rotas por las mejillas y me pides que me vaya de una vez, que no quieres caer más. Yo no dejo de repetirte, no dejo de repasarte las líneas que no han dejado de caer sobre tu piel... Sé, sé que tus adentros gritan desesperados y que el viento, o el tiempo, o los crujidos del reloj lo han hecho todo trizas, que miras a tu alrededor y no te encuentras por ninguna parte. Bien, estoy aquí; y esto será lo último que diga, estoy aquí delante tuya y, amor, no quiero que huyas, no esta vez, no esta vez y no conmigo queriéndote agarrarte tan fuerte.

domingo, 4 de abril de 2010

Hablo solo, bebo té,

tomo notas para hacer de mi vida sin ti, algo habitable.
Te encuentras justo en el centro de esta inmensa habitación que parece no tener salida y el mundo gira y gira a tu alrededor. La gente no olvida, esto recuerdalo. Querido amigo, deja de borrar mis pasos. Sueñas con salir de aquí, pero hacia dónde. Vives con la extraña sensación de que eres extranjera en cualquier sitio, vives de tus risas y de los (a)brazos de personas que se cuentan con los dedos de una mano. A veces sientes que nunca será suficiente. Pasas el día cuestionando tu vida y reescribiendo por qués. Eres...eres, quizá, demasiado desconfiada en un principio y demasiado poco al pasar la barrera. Muchos se preguntan si eres realmente así, como dicen las malas lenguas.

martes, 30 de marzo de 2010

Y de pronto sientes que envejeces.

Me veo asqueada y ensuciada por el paso de tanto hombre lleno de barro y con un único pensamiento. Y me decepciona el mundo y su descarga sobre mí. Porque supongo que yo no esperaba esto, que yo creía que la pasión era puro sentimiento y que existían las miradas infinitas en las que bucear y bucear sin pensar apenas. Y no hay humanos, nadie siente y nadie está cerca y yo tengo ganas de vomitar y escupir y vaciarme de tanto odio. Siento rabia, rabia de este mundo tan vulgar y tan banal. Yo quería abrazar y regalar sonrisas y formar parte de algo tan grande como la humanidad, y besar el cielo porque sí, y que me enseñaran a volar, pero veo barro y suciedad. Y si esto es todo, ¿para qué? Y si no hay razones, ¿para qué? Y si estamos ciegos de envidia, sordos por falsos y mudos de tanto gritar, ¿para qué?

Es cierto, sé que todos tus amantes fueron jugadores pretendiendo haber dejado el juego.

domingo, 21 de marzo de 2010

Al Norte de mí.

Podrías enseñarme a mentir. Yo debería aprender a guardar mejor mis sentimientos. Sigo un hilo de versos que surgen de mi piel, y no hago más que ponerles voz y alzarlos al público, mientras me reduzco a volumen mínimo y mi valor sustancial se va esfumando poco a poco, hago equilibrios sobre una tensa cuerda, con peligro a caer sobre las manos de personas impersonales, de humanos que se centran en vivir sobre su ombligo y que no dudarán en aplastarme si es que cabe la posibilidad. No he aprendido aún a seleccionar, ni a pensar antes de actuar y de dar zancadas hacia el fin inmediato de mi poco orgullo y de mi poca fe. Quizá es que todavía me queda justo eso, fe, confianza, y me agarro al mundo, que es lo único que me sostiene y a la vez me hace tambalearme tanto, tanto.

sábado, 20 de marzo de 2010

''Así que, si aún andas por aquí, y alguien vuelve a prometerte amor,

con dinero, encanto y alguna canción; por favor, prepárate para huir. Vete lejos y limítate a observar esta escena tan vulgar.''

miércoles, 17 de marzo de 2010

Las ganas de inventar y un ¡atiza! al cielo.

Qué sé yo de almas azules, de mentes privilegiadas o de ciudades encantadas. Por cada paso que doy gano doscientos. Llegamos a lo más alto, haciendo nudos en el viento y dejamos todo por un simple desencuentro. Matiz. Todo de depende de. ¿Qué? De ti, de mí. Volvamos a sentir. Gritemos por vivir.

sábado, 13 de marzo de 2010

No es sólo cuestión de suerte.

Existen mundos aparte, mundos mudos y en clave. Existen idiomas que no entiende el hombre, y vidas cruzadas sin querer. Existen risas que nadie sintió, existen besos que nadie besó. Existen manos que nadie enlazó y líneas que nadie siguió ni cortó. Existe la inmensidad del cielo, la inmensidad del tiempo, la inmensidad del aire que se cuela entre mis dedos. Existo yo, existes tú y existe el tacto amargo de tu piel. Existen mentiras que explotan, que brotan, y mentiras que cruzan campo a través. Existen los kilómetros de frío y los kilómetros de frío entre tú y yo. Existen palabras que atrapan, promesas que escapan y errores que matan. Existen rincones que nadie escondió y lugares que nadie pisó. Existe un punto de sentido y un punto de evasión, un punto de alivio y otro de adiós. Existe la realidad y existe la esperanza, existe mi realidad y existe mi vigilancia. Existen días rápidos, días negros, días tachados, días asonantes, días ganados, días robados al tiempo. Existen voces in-sonorizadas, existe el vapor de mi resonancia. Existen los crujidos de todos y cada uno de los relojes que miden al resto. Existe la calma y existe el perdón, existen las llamas en un corazón. Existe el rencor, el sabor, el ardor y el valor.
Pienso, luego existo; siento, luego, dejaré de existir en poco tiempo.

jueves, 11 de marzo de 2010

Debería ser insensible, para ser irreducible, y no desprenderme jamás.

lunes, 8 de marzo de 2010

Nadie podrá oírte, así que piensa en mí como si me quisieras.

Quizá estemos en el lugar exacto y el momento equivocado, o en el momento exacto y el lugar equivocado. Puede que, de cuando en cuando cruce el norte con el sur y el viento haga acuarelas con nosotros. Igual mis días pasan como rayos de luz, o pienso que, qué bien vivir, reír. Y sueño, de noche y de día, y sonrío porque sí y, ¿por qué no? Quizá un día me destroce con un simple roce, quizá me adueñe de un desastre y cambie el rumbo de visión del cielo. O salga corriendo de aquí, a un millón de años luz y pierda el vuelo y deje de tocar el suelo. Igual acabo cogiendo cariño a estas prisas desperfectas. Ya olvidé todo lo que no tenía que recordar, y el por qué. Qué más da, qué mas da, si yo sólo soy un simple espectador.

lunes, 1 de marzo de 2010

Yo sólo busco...

Al fin y al cabo, sólo importas tú, y cómo te encuentres contigo mismo. Y yo sólo quiero perderme más de la cuenta. La voz se me quiebra si me rozas, si me pasas por encima y ni me besas, ni me miras, ni me estresas. Yo sólo quiero rasgar la guitarra, llover sin mojarme, que nos siga la prensa. Cómo ya hice, cómo ya haré, como volveré a equivocarme otra vez, para volver a pensar ''aprende de ésta''. Esta vez, le gritaré bien alto a la luna, que no se descuide, que está encargada de avisarme, por si pasa una estrella sin que yo la mire y me alimente de ella.



Que me tiemblen las piernas.

sábado, 27 de febrero de 2010

Sordido.

Locura, desgarro o descontrol. Hoy me apetece cruzarme con una persona diferente, una mirada diferente, una conversación diferente. Unos labios diferentes, unas manos diferentes, una forma diferente. Una sonrisa diferente, una carcajada diferente. También quiero crecer muy rápido, aprender muy rápido, soñar muy despacio. Quiero gritar muy alto, llorar muy poco, llegar muy lejos. Quiero arder, prender, acercarme al cielo. Quiero huir, salir, fingir.

jueves, 25 de febrero de 2010

El valor para marcharse, el miedo a llegar.

Suelo quejarme de las despedidas. Suelo hacerlo porque digo que, constantemente, vienen sin avisar, y van sin que me haya dado cuenta. Me quejo de que no las saboreo, porque ni siquiera sé que están, de que no me conceden tiempo suficiente, de que ningún tiempo será nunca suficiente. Ahora, sin embargo, estamos aquí, anunciando esta despedida, susurrando palabras de amistad a nuestros oídos mientras nuestros brazos se recogen. Ahora, estamos aquí, y aunque sepa que me despido de tí para siempre, o quizá la palabra siempre sea demasiado abismal como para nombrarla, aunque lo sepa, no me lo creo. No he terminado de abrazarte lo suficiente ni te he repetido las veces suficientes que aquí estaremos aunque sea a kilómetros y kilómetros y kilómetros de distancia.

miércoles, 24 de febrero de 2010

La frontera entre siempre o jamás.

He aquí el quid de la cuestión. Nuestros caprichos se han reducido a esto, a una mirada agradable, culpable, y a un abrazo de despedida. Me haces sentir pobre, pobre de sentimientos, como si no tuviera otro modo de acabar, nunca. Por eso sonrío, creo, para enriquecerme de mí y de mis actos, pasados o futuros, e incluso presentes. Esta es mi manera de hacerme (y haceros) ver que todo marcha bien, de nuevo, o aún. Sin embargo, sigue rondando por mi cabeza si acaso merece la pena dejarlo todo por un minuto de interferencias, si acaso vale la pena satisfacer mis caprichos a pesar de las obvias consecuencias cercanas. En esto me baso, a veces prefiero sentir de todo, bailar con la luna, recorrer mis deseos, de punta a punta, mirar, arriesgarme el pecho, dejarme la piel. El momento, el minuto, la intensidad. Creo que mi vida(y quizá también la vuestra, aunque todo depende) está llena de momentos, de situaciones, que conllevan a consecuencias. Bien, de aquí lo importante para mí son las situaciones, no las consecuencias. Aunque mis consecuencias suelen ser un infierno, quizá porque me gusta sufrir un poquito de vez en cuando, cosa que sé que debo arreglar, y que de hecho, ahora mismo estoy experimentando, ya que, bueno, habiendo ocurrido ya, habiendo pasado y llegados a este punto, no veo necesario lamentarse de nada. Quizá mañana mi actitud cambie, cosa que también debería perfeccionar. Contrólate. Contrólate. Oh, cielos, me contradigo constantemente. Separemos las cosas. Bien: vive el momento, rechaza lo posterior. Sí.
Antes de ayer, mientras llovía a cántaros y yo le daba vueltas a lo que ocurriría al día siguiente, pensé que, cuando llueve, el tiempo pasa más deprisa y los momentos se tropiezan entre ellos. Ayer, cuando volvía a casa después de acabar con los besos y aunciar que los íbamos a tirar a la basura, pensé que, obviamente, un Febrero, siendo mío, no podía acabar bien. Bien relativamente, es decir, mis Febreros son revueltos, llenos de circunstancias y momentos que se absorben unos a todos, y actúan como una tormenta. Sirven para aprender de todo, sobre todo de mí y de las personas, que, basicamente, son la vida en sí.
Analicemos la siguiente frase: Quién no va a cambiar una semana por un minuto de interferencias. Es curioso lo jodidamente bien que me viene, es incluso cómico que la usara antes de saber que estaría hoy, aquí, ahora, con todo esto a mis espaldas y la sonrisa en la cara.
Please, for once in my life, let me get what I want. Lo gritaría tan alto que os rompería a todos los oídos.

martes, 23 de febrero de 2010

Traga, asiente y sonríe.

lunes, 22 de febrero de 2010

Préstame un hilo de luz.

¿Me quieres? Si no es así, no sé qué estamos haciendo aquí. Son cosas que necesito saber, que necesito que me repitas una y otra vez para que no se me olvide, o para recordarlo bien. Quiero que me lo digas, no sólo con los ojos y los labios sino con palabras y hechos. Quiero que me lo susurres al oído y que aparezcas en mis sueños. Te aseguro que no seré yo quien caiga, o quien sufra, quien salga perdiendo, quien corra, huya o grite. Te aseguro que amar ya he amado suficiente y que amarme ya me han amado demasiado poco, o demasiado en falso.

domingo, 21 de febrero de 2010

Caminaré ciego, porque sé que miras.

Desmayarse, atreverse, estar furioso,
áspero, tierno, liberal, esquivo,
alentado, mortal, difunto, vivo,
leal, traidor, cobarde y animoso;

no hallar fuera del bien centro y reposo,
mostrarse alegre, triste, humilde, altivo,
enojado, valiente, fugitivo,
satisfecho, ofendido, receloso;

huir el rostro al claro desengaño,
beber veneno por licor süave,
olvidar el provecho, amar el daño;

creer que un cielo en un infierno cabe,
dar la vida y el alma a un desengaño;
esto es amor, quien lo probó lo sabe.
Lope de Vega

jueves, 18 de febrero de 2010

Que bajen tus labios y me callen.

Te escucho cerca, real, in-finito. Te puedo ver, tocar, besar. Te recogo al suelo de mis espantos, te araño el corazón. Me reblandeces. Me recuerdas. Me enterneces, reencuentras, rescatas.
Casi, me tocas el corazón.

domingo, 31 de enero de 2010

Ya se han confirmado mis temores.

Esta forma de vivir, cabeza abajo, con el mundo al revés. Estas mañanas frías y ardientes de mí, estas tardes pesadas y largas y estas noches de luna llena, o entera, mirando hacia mí. Resurgo de tí, que solo estás, pero me sirve, y espero siempre, siempre espero no querer más que esto, no avanzar ni hacer florecer desalientos, ni un suspiro de más. Sólo quiero de tí que estés siempre, que nunca te vallas, que me salves cincuenta veces más, sin quererlo y sin saberlo apenas. Me sonreirás, como siempre, y con esa forma tuya de quitarle importancia a todo me besarás en la mejilla, yo reiré y esa risa llenará mis días de carcajadas volubles. Mentes unidas, fundidas, vibrantes, parpadeantes entre sí.

lunes, 25 de enero de 2010

Prendió la maleza como un retal.

Motivos o razones, preguntas con respuestas, sol de invierno y cielo azul sin nada que objetar. La gente y su mucho que decir. Diré que llegué hasta aquí con mis propios pies, pero miento. Estoy llena de promesas por cumplir y de susurros en alto, de huecos en el camino y de sonrisas calladas. Cursiva, retorcida y retórica. Intercambio de frases submarinas, cuando el viento deje de atusar mi sonrisa a su compás, viviré otra vez. Manos y tacto, me he gritado mil veces que estoy cansada de sentir, pero miento. Y mentir te hace ver la otra parte.

jueves, 21 de enero de 2010

Soy luna nueva fácil de partir.

Avenidas de emociones y asfalto, canciones de carretera. A tí te esperaba una chica. Esperas disimular, intentas engañar, y qué si gritan o lloran a más no poder. Viene y va, como siempre y como todo. Que no te extrañe verme rabiar o reír a mi antojo. Como hojas que danzan al viento así, nos elevará el viento/tiempo y nos hará rodar y rodar y rodar.

viernes, 15 de enero de 2010

Y allí me dí de bruces con gigantes.

Ahora, que nada espero y que nada tengo ya que añorar, ahora, hasta el mismo cielo asistirá a la cuenta atrás.
Pronunciando el verbo adecuado, o asistiendo a la mirada más fina, más larga, más dura, entonces todos atenderán. Ciencia infusa, quizás. De ocasión en ocasión, pongámonos en situación, tus ruinas son mi alimentación. Lo ambiguo y lo real. Sube a bordo y grita, el mundo te necesita.

domingo, 10 de enero de 2010

All your voices and all, all your choices.

Y yo grité ¡basta! y tú, asombrado, me miraste, diciendo que aún no habíamos empezado. Y tu mirada se deslizó por mis entrañas y mis ojos se pegaron a tus pestañas. Tus manos en mis manos, aliento sobre aliento y un segundo partido por doscientos.
Y ella dijo ''vete, o vuelve, o entiérrame aquí dentro'' y él, resignado, dió media vuelta y cayó en picado. Se volvió hacia atrás, admirando el pequeño trozo de corazón que se había dejado por el camino, y retorció el orgullo y lo aplastó.
Llevo aquí esperando más de lo que puedas o debas imaginar, he visto pasar cargas enteras de sueños y también he visto como esos sueños se convertían en polvo. He visto al reloj hacerme creer que las horas funcionan igual a pesar el paso atormentado del tiempo. He visto momentos de mi vida pasar, constantes, sin que apenas los viera reír. He visto como mi orgullo y como mis prejuicios se derretían unos más que otros y como las casualidades se amontonaban y después se acababan. Me he roto y me he visto crecer.
Todos tus pensamientos, tus actos, tus palabras, tus vocanadas de tiempo, te han visto aumentar de sentidos inevitablemente. Tengo testigos que afirman que te adoré lo suficiente como para no esperar más de tí que lo dice la prensa diaria.

viernes, 8 de enero de 2010

But it's never late.

Hacer por hacer, vivir por vivir, pasión por pasión, mi ritmo cardiaco al revés. Cada vez que me ves cruzo la pared. Vive por tí, hazlo por mí. Un sueño atado a otro sueño. Saberme extraña, sentirme dentro, vivirme hasta la médula. Con la certeza de que todo cambiará, de que todo y nada importa. Traduciendo relatividad a cien, a cero, buceando en cada esquina de mis segundos, corregidos por el aire. Las miradas esconden huellas y huellas de humanidad, pegada al alma, saboreo los delirios de oxígeno compartido. Acabo y empiezo, empiezo y acabo, el tiempo sucede. Por encima del peso del aire, palpo equilibrio, dentro de un pequeño desorden, siento que hay líneas marcadas que se acercan poco a poco, que algún día se fundirán pero que aún les falta tiempo, y eso es precisamente lo que a mí me sobra.
Se me cae el cielo a los pies y el hielo cubre mis zapatos.

Estoy de buen humor, sí señor.

No soporto los balances, ni los comentarios escondidosparaquelosencuentres. No soporto que me mires de reojo mientras piensas ''qué mala es, pobre de mí''. No soporto las estupideces ni los tanteos. No soporto que no me crean. Puedes creerte dura, o débil, pero ese es tu problema; puedes creer que el mundo va contra tí, pero el mundo no hace más que auto-beneficiarse, a nadie le importa lo que te duela o no. Puedes darle la vuelta a todo y malinterpretarlo cientodiez veces, hasta que te canses de pensar en el daño que todos te hacemos y en lo mucho que sufres tú. Cerrémonos, odiemonos, matemonos, ¡viva! ¡viva la sencillez!

lunes, 4 de enero de 2010

domingo, 3 de enero de 2010

Ráfaga de viento sideral.

Enciende, apaga. Luce, oscurece. Brilla, funde. Años luz, versos letales. Me he dado cuenta de que mi dosmilnueve ha sido un intermedio dentro de mi vida, ha sido un año a la deriva dentro de mi propio espacio-tiempo. Me he dedicado a cambiar todo de lugar cincuenta veces, a inquietarme, a buscarme, a encontrarme cerca. Han sido días y días de delirios en bicolor(y demás cuentos, y cuentos de más). Un año en vano, o quizá todo lo contrario, un año de relojes en pause. Lo he visto pasar sentada, aguardando, ausente pero inquieta, recibiendo pinchazos.
Gritarás; no te oiré. Es como el cuento de Pedro y el Lobo, o como cuando Rulo decía ''de tanto escuchar mentiras me he quedado sordo''. Acabaremos sordomudos de tanto gritarnos en vano. Nos precipitamos al principio de un precipicio.
Pienso, luego ¿existo?

viernes, 1 de enero de 2010

Los petardos que borran sonidos de ayer.

Churros, chocolate, gritos, litros, risas y globos por las paredes. No sé resumirme ni resumergirme, sólo sé que trescientossesentaycinco días me han servido para realizar todos los verbos en infinit(iv)o.
DosceroUnocero.